La conservación del mono carayá en Corrientes

Es posible que al ver monos carayá en la ciudad se piense que sus poblaciones están bien conservadas. Sin embargo, esta especie está categorizada como Vulnerable en Argentina.

Esto quiere decir que sus poblaciones están disminuyendo muy rápidamente y en poco tiempo pueden llegar a desaparecer de nuestro país.

En la Estación Biológica Corrientes (EBCo), dependiente del Centro de Ecología Aplicada del Litoral - CONICET - UNNE, se estudian a estos primates desde hace más de 40 años. A lo largo de estos años hemos visto el desmonte de grandes superficies de bosques nativos, incendios masivos y tala intensiva que provocaron la fragmentación y degradación de los montes, y su eventual desaparición. Estas son algunas de las grandes amenazas que enfrentan los monos carayá en la actualidad.

Florencia Quijano es bióloga y desde el 2018, cuando era estudiante de grado en la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE) - FaCENA, trabaja con monos carayá.Esta cercanía le permitió conocer detalles de estos primates tan particulares, desde su biología reproductiva y gran diversidad de comportamientos sociales, hasta su importancia ecológica. Los monos carayá se alimentan de frutos nativos y de esa manera actúan como dispersores de semillas, también comen flores y al visitar cada flor intervienen en la polinización, son importantes ingenieros ecosistémicos. La ausencia de los monos carayá afecta la salud del monte nativo, comprometiendo su capacidad para regular el agua y los nutrientes del suelo, así como su función como refugio y fuente de alimento para otras especies, impactando también en la vida de las personas. Motivada por mejorar esta situación, Florencia obtuvo en el 2020 una beca doctoral CONICET, lo que le permitió seguir con sus estudios en la UNNE, investigando cómo afecta la degradación y fragmentación del hábitat a la fisiología y comportamientos de los monos carayá. Sus resultados serán fundamentales para identificar grupos o individuos vulnerables, facilitando el diseño de estrategias y acciones de conservación. Además, su investigación permitirá priorizar y diseñar áreas protegidas o corredores biológicos que atiendan las necesidades de los monos carayá que habitan bosques fragmentados.

Por su parte, Debora Gilles se graduó de la licenciatura en Biología en la UNNE y ahora está llevando a cabo su doctorado en la misma área, contando con una beca doctoral del CONICET para apoyar su investigación.

Debora nos cuenta que su trabajo se centra en comprender cómo la fragmentación y degradación del hábitat afectan la dispersión y relaciones sociales de los monos carayá, nos cuenta un escenario cada vez más habitual para los monos carayá.

Los carayá son animales arborícolas, pero a causa de la reducción del hábitat y desconexión de montes, deben bajar al suelo e improvisar rutas alternativas, exponiéndose a perros, enfermedades y hasta pueden ser atropellados. De hecho,a en julio del 2023, mientras Debora y sus voluntarias realizaban el seguimiento de un grupo de monos cerca de la EBCo, los vecinos las alertaron sobre un grupo de perros que habían atacado a una hembra carayá mientras intentaba cruzar por el suelo hacia otro fragmento de monte, causándole así la muerte. La hembra tenía una cría pequeña, y lo que observaron a continuación fue un acontecimiento extraordinario. El macho adulto del grupo, en un acto poco común, asumió la responsabilidad de cuidar a la cría huérfana.

Es importante destacar que los machos adultos de estos primates, por lo general, no participan activamente en el cuidado parental.

Este evento, nunca antes registrado, nos lleva a reflexionar sobre las consecuencias devastadoras que puede tener la interacción entre la vida silvestre y el entorno urbano.Estos datos se comparten con colegas en congresos y publicaciones científicas.

En 2021 los monos carayá fueron declarados Monumento Natural en la provincia de Corrientes (Ley N° 6590), una noticia que enorgullece a los amantes de la naturaleza y la conservación.De esta manera el mono carayá y los bosques nativos que habita tienen la máxima protección en la provincia. Detrás de esta iniciativa se encuentra el equipo de la Estación Biológica de Corrientes y la organización Correntinos Contra el Cambio Climático.

Este éxito resalta la importancia de la colaboración entre científicos y ciudadanos en la conservación de la biodiversidad local.

Teniendo en cuenta esto, Débora junto a Lucila Citon, Rodrigo Bay Jouliá (becarios de la EBCo) y Martin Kowaleswki (director de la EBCo) lideraron un proyecto de ciencia ciudadana llamado “Aullando por la Ciudad” que convocó a la comunidad de Corrientes, Chaco y sus alrededores a participar activamente en la localización de grupos de monos carayá en la ciudad y sus alrededores. Esta iniciativa no solo busca recopilar datos valiosos para la investigación, sino también concientizar sobre las amenazas que enfrentan estos primates en su entorno. Los resultados fueron más que alentadores: una participación masiva de la comunidad demostró un profundo compromiso con la protección de los monos carayá y su hábitat.

*Ambas profesionales son becarias doctorales de la Estación Biológica Corrientes, Centro de Ecología Aplicada del Litoral (Conicet - Unne)